¿Qué tal estaría en los bajos del Ayuntamiento que ocupaba el juzgado?
Abundando en una sugerencia de Rosalbina Artidiello (Rosa la de Pin Rafer), publicada hace algunos meses en la columna de “Cartas al Alcalde” de La Crónica de Piloña, sobre la necesidad de acondicionar un espacio del edificio de La Obra Pía de Piloña -lo que haría honor a su nombre- para Albergue de Peregrinos y la reciente muerte en Cangas de Onís, de uno de estos pobres mendigos, me dio todo ello pié para retomar tan humanitario asunto. que comienzo así: No merecemos estar incluidos entre los pueblos practicantes de ninguna religión que se precie; ni figurar entre los países civilizados del primer mundo; ni haber suscrito la Carta de los Derechos Humanos de la ONU; ni abrogarnos la apariencia de personas solidarias, mientras permitamos que muchos de nuestros desvalidos semejantes en situación de extrema pobreza, se vean obligados a dormir a la intemperie, (portales, cajeros, puentes, bancos públicos, …), en tanto se destinan a gastos superfluos ingentes cantidades de dinero público, tanto a nivel local, autonómico o estatal. Y quiero poner el acento en las gélidas noches de invierno que se cobran muchas vidas de estos pobres seres abandonados de la mano de Dios y de los hombres. Sin ir más lejos, recientemente en Cangas de Onís, una persona apareció muerta en la caja de un camión abandonado. Aunque nuestros principales responsables de “mirar para otro lado”, son los organismos obligados a administrar los dineros públicos, solucionado las necesidades más apremiantes de sus gobernados, aportando más inversión para ayudar a los que menos tienen, que no deja de ser una forma de redistribución fiscal de la riqueza. En segundo lugar las religiones y ONGs, cuando cuentan con financiación suficiente o habitáculos disponibles al efecto. Y por último aquellas personas particulares que se encuentran en una buena situación económica.
Una vez que ya hemos señalado los colectivos más implicados en solucionar esta vergonzosa situación, me permito sugerir las características de la distribución y contenidos de los solicitados ALBERGUES DE TRANSEUNTES: 1), Un local de fácil acceso y céntrico. 2),- Con camas provistas de sábanas y mantas y 3),- Dotado también de wáter y ducha, con jabón y toallas.
Naturalmente que todo lo dicho necesitaría para su buen funcionamiento, la creación de cuatro puestos de serenos parar facilitar la información a los usuarios y vigilar las instalaciones de este equipamiento público. Y que mejor momento que este, con un remanente de tesorería municipal millonario. Por pedir, que no quede.